Rim, rim. rim...suena el . Amanece un nuevo día lleno de . Óscar abre sus ojos y mirando hacia la dice:
- ¡Oh! ¡Oh! ¡Oh! ¡Qué día tan bonito! ¡No quiero levantarme! ¡Deseo quedarme en la cama!
Al fondo del salón se oye a su :
- ¡Óscar! ¡Óscar! Levántate! ¡Hay un para ti!.
El se acerca a la puerta de la habitación. Pega su a la puerta y abre mucho sus ojos. De nuevo escucha a su :
- ¡Óscar! ¡Óscar!
El niño ya no tiene sueño. Ríe y está contento. Enseguida verá su .
- ¡Mamá! ¡Mamá! ¡Ya estoy aquí! ¡Estoy despierto!.
- ¡Qué bien Óscar! ¡Acércate y mira lo que hay encima de la mesa!.
Nada mas entrar en la habitación Óscar dice:
- ¡Qué caja tan grande! ¡Qué grande! ¡OH! ¡Quiero abrirla!
El se acerca tan rápido que tropieza con la .
- ¡Buahhhh, buahhhh! ¡Me he caído! ¡Me he caído! ¡Buahhhhhhhh!
- ¡Pobre chico! ¿Estás bien hijo?
- ¡Noooooooo! ¡Mamá, mamá me duele muchoooooooooo!!!!
Afortunadamente, no se ha hecho mucho daño. Ha sido mas el susto que el porrazo. Al fin llega hasta la mesa y coge entre sus manos el regalo. Está tan contento que rompe el papel y lo abre .
- ¡Qué bonitooooo! ¡Qué bonitooooo!.
¡Mamá, mamá es el osito que tanto me gustaba! ¿Quién me lo ha regalado?
- Ja, ja, ja... -ríe contenta la mamá-. Ve a la habitación de invitados y tendrás la respuesta.
Óscar con el osito en la mano se dirige por el pasillo a la habitación. Abre la puerta y:
- ¡OOOOOh, OOOOOh! ¡Tita, tita Olgaaa! ¡GRACIASSS! ¡GRACIASSSS! Es mi osito preferido. Me gusta mucho tu regalito.
El niño imagina ya al osito y .
Se acerca a su tita y le da un beso y una.
Su tita le dice:
- ¡Sabía que tenías muchas ganas de tener ese osito!
- Tita, este oso es como el de mi amigo Oriol. ¡Qué ojos tan redondos tiene!
- Mi querido Óscar, ahora le tendremos que buscar un nombre.
- Ja, ja, ja...¡Claro que siiii! A ver... a ver... Ja, ja, ja...¿Oscar como yo? ¡Nooooooo! Ja, ja, ja... ¿Olga como tu? Ja, ja, ja.... ¡Nooooo! ¡Es un oso no una osa!
- Ja, ja, ja...Oriol como tu amigo?
- ¡Nooooo! A ver... a ver... ¡Ya está! Lo llamaré "OTTO"
- ja, ja, ja... ¡Muy bien! ¡Me gusta mucho ese nombre!
Ambos se dan un y sonríen.
Y.... sonriendo, sonriendo...este cuento se va corriendo...hasta el
© Mª Eugenia Pérez Cáceres.